Él, como todos tiene su familia y debe responder por ella, así lleva 4 años en su puesto de la esquina de la 21 de la ciudad de Pereira, preparando estos jugos que para algunos de sus clientes son medicinales o afrodisíacos.
Don Carlos es uno más de los vendedores ambulantes e informales de la ciudad y del país, pero que gracias a su amor por su trabajo y su carisma lleva el resultado de su labor a su familia todos los días.
Él le da gracias a Dios por sus clientes que no le fallan a la hora de comprar sus deliciosos vasos de jugo de naranja natural.
Don Carlos trabaja con sus herramientas que son: un exprimidor de naranjas, una jarra, un colador, deliciosas naranjas y vasos desechables. Que acompaña día a día su labor.
Es uno más de los vendedores ambulantes del país que gracias a su trabajo y tesón llevan el pan diario a su familia,” Ojalá algún día mejore la situación de todos y haya mejores oportunidades de empleo para nosotros” dice Carlos. Nunca le falta un cliente, sobre todo en días de sol.
Estos jugos contienen zumo natural de naranja, cola granulada, huevo, miel y vitaminas; dependiendo del gusto de los clientes de este vendedor.
Frescos, saludables son estos jugos que preparados con mucho cuidado y amor son servidos de las manos de Carlos, y al beberlos son una delicia para cualquier transeúnte.
¡Salud!
